lunes, 15 de septiembre de 2008

En el ojo del huracán

Llevamos un tiempo sin actualizar y con motivo. Por un lado la actividad del final de vacaciones ha sido frenética y por otro lado Patineteteam necesita su propio "tempo". Además, hemos empezado a trabajar después de las vacaciones, la actividad colegial se ha reanudado y el Campeonato Gallego ha vuelto por sus fueros.

Hace unos días estuvimos corriendo la 3ª prueba del Open de Verano en Porriño, en el circuito Go - Kart. La pena de este circuito, para nosotros, es que nos queda muy lejos y con muchos peajes por el camino, sino estoy seguro que iríamos más a menudo. Allí nos fuimos con la intención de hacer algo interesante aunque la participación fuese escasa, pero lo que en un principio para Pablo fue un paso atrás, se terminó volviendo un acierto el ir a correr este campeonato. Nos ha permitido trabajar aspectos con Pablo que teníamos descuidados, fijarnos un poco más en él, que se lo merece, en qué necesita, qué hace y cómo lo hace. Yo estoy tremendamente limitado en este aspecto pues yo veo lo que veo, pero no sé si es lo correcto. Además, como estoy tan liado con otras cosas, a veces no le prestó la atención que debiera. Pero Pablito, con sus luces y sus sombras, siempre termina consiguiendo tú atención, y al final te das cuenta que si trabajas con él, sacas un rendimiento notable.
La carrera de Porriño no tuvo más historia que el hecho de practicar cosas que habíamos aprendido y foguearnos con los pilotos locales, hartos de dar vueltas al circuito porriñés. Allí nos batimos con nuestro compañero Borja y con Paulinha Costas. Con Borja hubo poca historia pues le falló el motor en las dos salidas y ya no hubo tema. Fue una pena porque Borja, Jita, ha mejorado a pasos agigantados. Ahora sus padres tienen que trabajar con él aspectos no tan técnicos, no tan resultadistas a corto plazo pero que les darán sus frutos a medio. Y Borja se lo merece. Las carreras contra Paula fueron bastante bonitas por el duelo que mantuvieron a la décima y Pablo se lo pasó bien, que al fin y al cabo es lo que cuenta. La final la ganó Paula y David, su padre, no entraba en el pantalón de la alegría.

David Costas es de esos tipos que necesitan estar en todos los "fregaos", tiene que estar haciendo cosas, dándole vueltas a la cabeza a historias y aventuras, metido en medio de todos, calmando a los alterados y alterándose cuando está todo tranquilo. David Costas es... Costas, para lo bueno y para lo malo. Los que le tratamos, no digo los que le conocemos, sabemos que es un tipo de carácter complicado por sus altibajos, y lo aceptamos así porque sabemos el motivo. Su gran ilusión, su porqué se llama Paula. El cariño con el que David trata a su niña es infinito, lo que hace David por Paulita ésta nunca podrá agradecérselo lo suficiente, aunque para David es recompensa las miradas de Paula, su sonrisa por estar a gusto con él y cuando con su acento del sur de Galicia le dice: "Papi..." Ahí David se derrite y todos los sufrimientos diarios, semanales, desde hace tiempo, los olvida de golpe. Ya vendrá la dura realidad.

Este fin de semana nos tocaba refrendar en la carrera de A Magdalena lo que habíamos aprendido en las últimas pruebas. Pablito llegó el sábado con unas ganas increíbles, estaba dispuesto a darlo todo. Esfuerzo, garra, espíritu, ánimo, intención... esto lo tenía Pablo para este fin de semana. El sábado volaba por el circuito, hacía unos tiempos sensacionales que nos hacía albergar esperanzas de cara a la carrera del domingo. Antes teníamos que pasar por Casa Florinda a descansar, a tomar su sopa y un poco de carne muy rica. Hasta nos atrevimos con un brazo de gitano sensacional, casero que estaba buenísimo... hasta mi régimen me dijo que estaba bueno...

Pablo se levantó cansado el domingo, y es que él necesita descansar un poco más de cara a la carrera, pues 8 horas no le llegan, pero los caprichos de los horarios es lo que tiene. Aún así salió a los libres con muchas ganas de hacerlo bien, pero en los cronometrados se salió. Tan sólo un sensacional crono de Josito le impidió tener su primera pole, una lástima, pero sin duda una gran recompensa para él. Después de lo que ha sufrido este año con las historias "paralelas", necesitaba este resultado, necesitaba saber que está ahí, que puede. Después en carrera fue más complicado e hizo lo que se pudo hacer, tenemos que sacar nuestras conclusiones y trabajar con él también otros aspectos, fijándonos más en qué hace, donde necesita ayuda y cómo podemos resolver los problemas.


Él estaba feliz, pero sobre todo relajado por sacarse una presión de encima que no debe de tener. Lo que hubiese dado por ver su cara durante la vuelta lanzada en la que iba delante con Josito... ¡eres un crack Pabliño!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

gracias amigo por intentar entenderme aunque a veces ni yo mismo me entiendo,en la vida una debe marcar su camino y yo el mio hace 7 años que se llama paula como tu entenderas lo demas para mi no es nada.

Anónimo dijo...

me gusta el texto un abrazo familia!